Ansiedad

Es normal en algunos momentos sentir ansiedad, sobre todo si llevas un nivel de vida estresante. Aún y así la ansiedad y la preocupación constante y de forma continua son difíciles de controlar. Además, pueden intervenir en nuestras actividades diarias e impedirnos realizar nuestra rutina de una forma normal.

La ansiedad surge como un mecanismo de defensa. Nuestro cuerpo cuando siente que hay una amenaza se pone en alerta para poder responder mejor a la amenaza. El inconveniente surge cuando nuestro cuerpo está en constante alerta  y la sensación de amenaza se prolonga en el tiempo y no se va. Es ahí cuando sentimos una sensación de angustia generalizada en todo el cuerpo y sentimos que la ansiedad nos invade y nos impide hacer nuestro día a día.

Síntomas  

Algunos de los síntomas pueden ser:

  • Preocupación o ansiedad constantes y en exceso ante ciertas circunstancias que en realidad tienen un impacto menor del que nos pensamos
  • Imaginarse que va a suceder lo peor ante una determinada situación.
  • Que cualquier situación la consideremos una amenaza, aunque no lo sea.
  • Sentirnos desbordados ante una incertidumbre.
  • Indecisión, angustia y miedo a la hora de tomar una decisión por miedo a equivocarse.
  • No parar de darle vueltas a un mismo problema o preocupación,
  • Sentir que no te puedes relajar, te sientes nervioso y una sensación de estar al límite.
  • Dificultad para concentrarse
  • Angustia a la hora de dormir e incapacidad para relajarse.

Cuándo acudir a terapia

Recuerda siempre acudir a un profesional cuando sientes que no puedes controlar la ansiedad, cuando sientes que la ansiedad está controlando tu vida e interfiere en tus actividades cotidianas, en tu trabajo, con las personas que te rodean,…Además si sientes que los pensamientos negativos no dejan de rondar tu cabeza, es una señal muy clara de que necesitas ayuda profesional.