Esta nueva emergencia sanitaria y social que estamos viviendo nos está transformando en todos los ámbitos. Tanto adultos como niños nos tenemos que adaptar a nuevas formas de vivir y organizarnos, afectando directamente a las emociones y a nuestra conducta. Los más pequeños suelen tener escasas estrategias para lidiar con la frustración y ello puede repercutir directamente en los hábitos de alimentación, sueño…

Queremos compartir algunas recomendaciones importantes de los hábitos de alimentación durante, especialmente durante el confinamiento.

 

  • Rutina: Es muy importante crear una rutina diaria para afrontar con actitud positiva. Establecer horarios de comidas e intentar que sean en familia.

 

  • Todos a la cocina: Ahora es una buena oportunidad para permitir que los mas pequeños colaboren en la preparación de las comidas. Tiene varios beneficios importantes, les ayuda a ganar autoestima, a mejorar su alimentación, a probar y experimentar con texturas y sabores, a crear un mayor vinculo con la familia…

 

  • Hagámoslo fácil: Si nos cuesta elaborar un menú semanal podemos coger ideas o como referencia el de la escuela infantil u otros similares.

 

  • Regresiones: En estos momentos podemos observar un retroceso en algunos hábitos de autonomía, podríamos observar que ya no quiere comer solo, que se niega delante de algunas comidas, etc. Es normal y debemos tener en cuenta que es una forma de negar y expresar delante de la situación que vivimos. Es importante mantener una actitud positiva y paciencia.

 

  • Expresar las emociones: Tanto si aparecen regresiones o negación, como si no, es importante hablar de las emociones, pintarlas, explicar cuentos… Identificar nuestras emociones y la de los más pequeños les ayudará a saber que les pasa y poder gestionarlas mejor.